Entre el 17 de julio y el 24 de agosto, con apogeo el 12 de agosto y durante toda la noche podremos disfrutar de la ya famosa y anual lluvia de meteoros conocida como Lágrimas de San Lorenzo o las Perseidas (Wikipedia).
Es de alta actividad pero no es la más grande, de echo hay 2 superiores pero al ser ésta en época vacacional es la más conocida y disfrutada por miles de personas desde diferentes lugares de la geografía.
Se pueden apreciar alrededor de 2 meteoros por minuto, hablamos de media, podemos estar rato sin vislumbrar ninguna y de repente ver algunas seguidas, todo esto depende del factor suerte y de lo atentos que estemos al cielo estrellado, también son muy importantes los factores ambientales, así como la contaminación lumínica y un posible cielo no despejado.
Son meteoros de velocidad alta 59 km/s que radian de la constelación de Perseo o Perseus. Por tanto su alta declinación (+58º) no permite su observación en regiones meridionales, ya que desde el Ecuador alcanza tan sólo los 32º de altura.
El padre de estos meteoros es el cometa Swift-Tuttle que posee una órbita de 135 años, fue descubierto por Lewis Swift en 1862, en los inicios se pensaba que este cometa acabaría impactando sobre la tierra en el 2126 pero unos cálculos posteriores aseguran que las posibilidades de choque son casi nulas.
Los efectos de una colisión de la Tierra con un cometa como este, con un diámetro de cerca de 10 Kilómetros, serían devastadores. Tal colisión muchos piensan que habría sido la causa de la desaparición de los dinosaurios. La ‘explosión’ resultante del choque sería unos 1.000 millones de veces más grande que la bomba que destruyó a Hiroshima. Una enorme nube de polvo, lanzada hacia la atmósfera superior, envolvería al globo durante muchos años, y esto causaría muy intensos cambios en el clima, incluso produciendo una era glacial. Los efectos sobre la civilización sólo pueden adivinarse, pero serían muy severos.
Si queremos aprovechar la ocasión y gozar viendo las lágrimas de San Lorenzo deberemos buscar un sitio sin luz, una playa, la montaña o cualquier otro lugar lejos de la ciudad, y estar cómodos, tumbados sería una buena postura para concentrarse en las estrellas. Entonces bastará con mirar al sur-este.
Marte también estará muy presente ese día, y muy cerquita de Perseus.
No olviden abrigarse que aunque sea agosto, a esas horas hace frío!.
Aquí algunos consejos para disfrutar de este espectáculo:
- Visión al cielo amplia y hacia el este.
- Cielo oscuro; los meteoritos no son extremadamente brillantes así que un cielo oscuro ayudará a apreciarlas mejor.
- Disponer de tiempo; la impaciencia es un mal amigo para estas situaciones.
- Llevarse una silla cómoda.
- Una manta; que por muy agosto que sea, a esas horas y sin moverse refresca.
- Un sombrero o una gorra, puede ayudar mucho a paliar la iluminación que puedan provocar agentes externos, como farolas o edificios.
- Telescopio o anteojos, personalmente no recomiendo un telescopio puesto que sólo apreciamos una pequeña parte del cielo y muchas nos pasarían desapercibidas.
- Mapa del firmamento.
- Estar descansado, ya que pasaremos parte de la noche despiertos.
- Amigos, familia o vecinos; la compañía siempre es grata.
- Un poco de conocimientos sobre lo que estamos viendo nos podría hacer disfrutar más aún del espectáculo.
Más información:
Wikipedia: Las Perseidas, Swift-Tuttle.
Oarval: Perseidas, Swift-Tuttle.
Isaac Newton Group of Telescopes.
Astromía.
International Meteor Organization.
Astroenlazador.
Nasa: Las Grandiosas Perseidas.
